Codifico, Luego Creo.
4 min readMarie Fa
Otros idiomas:fren

Codifico, Luego Creo.

Construyo como navego: con intuición, precisión, obsesión. Este es mi manifiesto.

Un manifiesto en fragmentos. No una hoja de ruta. No una landing page. Más bien una bocanada de aire fresco. Un mapa abierto para quienes construyen desde las entrañas.

Me encanta programar. Pero no para producir. Para crear.

No soy una fábrica de entregables. Soy una buscadora. Una creadora de espacios que respiran. Cuanto más vacío hay, más libre me siento. Me encantan los scrolls flotantes. Las interfaces que susurran. El tipo de sitio que se siente — no solo se usa.

Menos fricción. Más dirección. Menos gadgets. Más silencio bien colocado.

Quiero código que fluya. No que golpee. Y si puedo hacerlo caber en tres componentes y un useEffect, mejor aún.

¿Qué es lo que más amo? Una base de datos bien retorcida.

La DB no es solo el backend. Es el corazón. Es donde respiro. La retuerzo, la mapeo, la enlazo. A veces la amenazo. Y me responde con un foreign key constraint failed. Bien jugado.

Pero la amo igual. Porque una base de datos bien pensada es una máquina de guerra. Y un patio de juegos. Y un poema lógico.

Supabase, no eres mi "grito del corazón". Eres mi laboratorio nuclear. Y a veces mi campo de batalla.

Construyo con rigor. Pero lo hago como una artista.

Pulo mis paddings como quien talla un diamante. Coloco mis z-index como trapecistas. Busco la línea justa — la que hace que la estructura sea legible Y táctil.

Escribo código que compila. Pero a veces, espero que haga estremecer.

No me importa ser "óptima". Quiero ser intensa, legible, elegante. Me encanta que mi código tenga flow. Que baile un poco. Que se atreva.

Vivo junto al agua. Y eso lo cambia todo.

El mar es mi programación en pareja. El viento me ayuda a ordenar mis ideas. La navegación me obliga a pensar en movimiento. Y la laguna me recuerda que todo esto — el código, la web, el ruido — no es nada si no tienes un rumbo claro.

Creo para respirar. No para impresionar.

Muchas de mis ideas surgen mientras navego. Llegan como ráfagas. Suaves a veces, brutales a menudo. He aprendido a hacerles espacio.

Lo he probado todo. Y he elegido mi bando.

¿FTP? Nunca más. ¿WordPress? Gracias por los años. Pero he pasado a otra cosa. Hoy es Next.js, React, Supabase, Vercel.

Navego en línea recta. Mantengo el control. Quiero construir cosas útiles, estables, potentes — incluso cuando son pequeñas.

Mi stack es mi zona de confort. Y mi trampolín para ir más lejos.

No busco la perfección. Busco la resonancia.

No necesito que mi sitio sea perfecto. Quiero que provoque un "sí" silencioso en quienes se lo encuentran. Un escalofrío. Un deseo de escribirme. Una sensación de "ella lo entiende".

Construyo para quienes captan rápido. Que aman los detalles. Que no necesitan que les griten.

Publico poco. Pero cuando lo hago, sacude.

No estoy aquí para hacer ruido todos los días. Cuando hablo, es porque algo me habita. Cuando publico, es porque un proyecto me ha atravesado.

Y a menudo, da en el blanco. Porque es raro. Porque no está marketizado. Porque es real.

El algoritmo respeta más el fuego que el ritmo.

Me encanta programar. Pero también me encanta transmitir. Escuchar. Tomar la idea de alguien y llevarla más lejos.

Soy desarrolladora. Pero también traductora. Alquimista. Escucho una idea, la absorbo, la deconstruyo y la hago tangible. Eso es lo que amo.

Programé PHP, temas de WordPress, sitios sin base de datos durante mucho tiempo... pero lo que amo hoy es dar vida a una visión que necesita forma, impulso y un poco de magia.

Rendre notre code plus humain

Lo que leo me transforma. Lo que aprendo me nutre.

Releo a Harari constantemente. Sapiens. Homo Deus. Estos libros me persiguen. Me despiertan. Me empujan a crear herramientas humanas, no solo interfaces bonitas.

También amo las palabras. No los poemas perfectos. Sino las frases justas. Los sonidos que resuenan. Los idiomas que abren. Hablo francés, inglés, español. Y mañana por la mañana, empiezo con el japonés. Para ver. Para sentir otra lógica.

No solo programo con un stack. Programo con todo lo que he vivido, leído, amado, aprendido.

¿En resumen?

Programo como vivo: con intensidad, curiosidad y un toque de insolencia. Vivo como programo: en versión desplegada, nunca en borrador.

Si tienes un proyecto en bruto. Si tienes una idea que no te deja dormir. Si no le temes al vacío — ven a charlar conmigo.

Compartir este artículo

Comparte si te gustó este artículo — ¡realmente ayuda!

Marie Fa

Desarrolladora full-stack de Québec, radicada en Bacalar — navego entre aguas turquesa y líneas de código.

Fundadora de Murmure, SocialRally y Adorable Sailing.

setcodeandsail.com